La movilidad eléctrica está transformando la forma en que nos desplazamos, y por eso cada vez es más habitual que los propietarios de un coche eléctrico o híbrido enchufable decidan instalar un cargador para su coche para uso particular. Pero, ¿cómo se lleva a cabo este proceso?

Para que la instalación se ajuste a lo estipulado en la ley, es necesario conocer la normativa a la hora de instalar el cargador para coche eléctrico en una comunidad de vecinos, donde la línea que separa los espacios privativos de los comunes a veces es difusa, y hay que tener claro hasta dónde puede llevarse a cabo la intervención para proceder a instalar un cargador de coche eléctrico.

Todo el proceder se ha de regir por la Ley de Propiedad Horizontal y los Estatutos de la Comunidad. Al instalar un punto de recarga, se asume que se cumplen con los principios establecidos en ambos documentos.

¿Es posible instalar un cargador de coche eléctrico en un garaje comunitario?

La respuesta es sí. Es completamente posible instalar un cargador para el coche eléctrico en un garaje comunitario para tenerlo disponible en tu plaza de garaje. Pero hay que tener en cuenta varios aspectos:

  • Espacio y acceso. El garaje es comunitario, pero las plazas de garaje son espacios privativos. Si para proceder a la instalación fuese necesario atravesar alguna plaza privada, sí habría que pedir permiso al propietario de dicha plaza; por lo demás, en el 99% de los casos, y siempre que la instalación discurra por las zonas comunes del garaje, no será necesario contar con el visto bueno de los vecinos dado que es para uso particular, no comunitario.
  • Infraestructura eléctrica. Es necesario evaluar la red eléctrica del edificio para asegurarse de que puede soportar el consumo adicional. Un chequeo completo podrá prevenir además de posibles problemas de sobrecarga y picos de energía.
  • Acuerdo entre vecinos. Como decíamos, para instalar un cargador de coche eléctrico en un garaje comunitario no es necesario pedir permiso a la comunidad, siempre y cuando para instalarlo no sea necesario atravesar la plaza de garaje de otro vecino. En ese caso sí sería necesario solicitar su beneplácito, pero si discurre por las zonas comunes del garaje, no es preciso.

¿Qué dice la normativa a la hora de instalar un cargador de coche eléctrico en garaje comunitario?

La normativa a la hora de instalar un cargador para el coche eléctrico en un garaje comunitario ha evolucionado en los últimos años. Los puntos clave de la normativa que se debe tener en cuenta son los siguientes:

  • Derecho a la instalación. La legislación reconoce el derecho de los propietarios a proceder a la instalación de puntos de carga en sus plazas de garaje privadas y, en la mayoría de ocasiones, no hace falta ni tan siquiera contar con el visto bueno de la mayoría de vecinos: bastará con notificarlo al administrador y/o el presidente de la comunidad.
  • Seguridad y calidad. Es obligatorio que la instalación se realice cumpliendo todas las normas de seguridad eléctrica. Esto incluye el uso de materiales y equipos homologados, así como la realización de las instalaciones por técnicos especializados.
  • Actualizaciones y revisiones. No es obligatorio llevar a cabo revisiones de la estación de carga, y a veces ni tan siquiera necesario. Si hablamos de cargadores para uso particular y, por tanto, de una instalación privada, es el propio vecino el que se encarga de tener su cargador en unas condiciones óptimas.

¿Cómo instalar un cargador de coche eléctrico en un garaje comunitario?

La instalación de un cargador para coche eléctrico en un garaje comunitario puede parecer compleja, como ya tratamos en nuestro post dedicado a la instalación de cargadores en garajes comunitarios, pero se puede dividir en varios pasos claros. 

  1. Estudio preliminar y viabilidad técnica. Lo primero es realizar un estudio técnico del garaje. Este análisis debe determinar si la infraestructura eléctrica actual es suficiente o si es necesario realizar mejoras. Se evaluará la potencia necesaria y se revisarán las condiciones del cableado y el cuadro eléctrico.
  2. Notificación a la comunidad. Una vez confirmado que la instalación es técnicamente viable, se puede proceder al comienzo de los trabajos simplemente notificándolo al presidente o al administrador. Si la instalación transcurre por las zonas comunes del garaje no es preciso alcanzar un acuerdo de junta; sólo si para instalarlo hubiese que intervenir en una plaza privada ajena sería necesario pedir permiso de su propietario.
  3. Verificación y puesta en marcha. Una vez finalizada la instalación, se realiza una prueba de funcionamiento. Este proceso incluye la verificación de todos los componentes eléctricos y la comprobación de la conectividad del cargador. Sólo cuando todo funciona correctamente se da por concluido el proceso de instalar el cargador para un coche eléctrico en un garaje comunitario.
  4. Mantenimiento y revisión periódica. En muchas ocasiones el mantenimiento ni tan siquiera es necesario, aunque es el propietario de la estación de carga el que se ha de encargar de notificar cualquier incidencia en su funcionamiento o, si lo prefiere, acordar un plan de mantenimiento con el suministrador para hacer un chequeo periódico.

¿Cuál es el precio de instalar un cargador de coche eléctrico en garaje comunitario?

El precio de instalar un punto de recarga para un coche eléctrico en un garaje comunitario puede variar significativamente en función de varios factores. Por lo general, en el precio de la instalación influye:

  1. El tipo de cargador. Existen diferentes tipos de cargadores, que van desde los de carga lenta hasta los de carga rápida. Los modelos de carga lenta suelen tener un coste menor, mientras que los de carga rápida requieren equipos más sofisticados y, por tanto, tienen un precio superior.
  2. La infraestructura eléctrica existente. Uno de los aspectos que más puede influir en el coste de la instalación es la infraestructura eléctrica actual del inmueble. Aunque no suele ser necesario modificar la acometida eléctrica de la vivienda, sí puede ser necesario adaptar el cargador a la potencia máxima disponible. En este sentido, un dato clave a tener en cuenta es la potencia contratada, ya que determinará si el coche podrá cargarse más rápido o más lento.
  3. Los costes de mano de obra y tramitaciones. La intervención de profesionales para el estudio, el diseño del proyecto y la instalación propiamente dicha repercute en el coste total. Además, se deben considerar los gastos derivados de la tramitación de permisos y, en algunos casos, la solicitud de subvenciones o ayudas.

En definitiva, los dos factores clave que más pueden hacer variar el precio de la instalación son:

  1. Los metros de cable necesarios, desde el contador hasta el cargador en un garaje comunitario, o desde la caja general de protecciones en una vivienda unifamiliar.
  2. La obra civil necesaria, como los pasos de forjado en garajes comunitarios o la realización de zanjas y regatas en viviendas unifamiliares.

En términos generales, el precio de instalar un punto de recarga para coche eléctrico en un garaje comunitario puede oscilar entre los 1.000 y los 3.000 euros por punto de carga. Es importante recordar que este rango es aproximado y que el coste final dependerá de las condiciones específicas de cada instalación y de las características del cargador elegido.

Además, algunos propietarios pueden beneficiarse de subvenciones o ayudas públicas que faciliten la inversión en movilidad eléctrica, lo que supone un incentivo a tener en cuenta para apostar por la instalación de un cargador particular para tu coche eléctrico.