Hemos oído muchas veces que, cuando pasamos del motor de combustión a eléctrico, tenemos que aprender cómo se conduce un coche eléctrico.
Esto, lejos de preocuparnos, nos debe de tranquilizar.
No vamos a hablar de modificar nuestra forma de conducir, lo que vamos a hacer es simplificar.
El coche eléctrico está diseñado para facilitar la vida del conductor así como de los peatones, que van a dejar de escuchar fuertes sonidos de frenadas, de motores en ralentí o de tragar el humo de los tubos de escape.
Por tanto, cualquier aprendizaje a la hora de manejar un coche eléctrico va a beneficiar a la sociedad y al medio ambiente.
En este artículo te vamos a dar unos consejos para re-aprender a conducir.
¿Cómo se conduce un coche eléctrico? Consejos y recomendaciones
Conducir un coche eléctrico es manejar el vehículo optimizando la batería. Es decir, conseguir la mayor distancia con el menor consumo.
Esto no supondrá ningún tipo de estrés, como veremos a lo largo de este artículo.
Al igual que con el vehículo de combustión, lo que queremos es alargar al máximo la autonomía del coche.
No vamos a descubrir nada que cualquier persona que ya haya conducido no sepa.
Cuando llenamos un depósito con carburante fósil y sobre todo cuando las tarifas están desorbitadas, tenemos dos opciones:
- Dejar el coche aparcado el máximo tiempo posible.
- Aprender a conducir reduciendo el consumo.
Sin embargo, y con el objetivo de mejorar la salud de nuestro bolsillo y del planeta con energías renovables, debemos tener en cuenta una serie de recomendaciones:
Conducción eficiente o conducir el vehículo con suavidad:
- Evitar las aceleraciones agresivas y los frenazos bruscos.
Y lo que hacemos es aumentar la velocidad de manera progresiva o reducirla de igual forma.
Además, activar la deceleración regenerativa con la función B (marcha adelante con frenada progresiva), nos va a ayudar a recargar la batería.
- Conducir a una velocidad media y constante. El modo ECO nos va a permitir suavizar las reacciones del vehículo optimizando el consumo de energía.
- No abusar de la climatización: ni demasiado calor, ni un frío polar. Los principales consumos de la batería del coche eléctrico vienen dados por (evidentemente, a parte del propio motor de propulsión) la temperatura que pidamos al climatizador.
Un uso adecuado va a hacernos alargar la autonomía de nuestro vehículo.
- Aprovechar el freno regenerativo para recargar la batería. El frenado en los coches eléctricos o híbridos, a diferencia de los coches de combustión que la desaprovechan en su totalidad, está diseñado para auto-cargar la batería.
Si frenamos en el último momento o de golpe, perdemos la oportunidad de convertirnos (a diminuta escala) en nuestra propia fuente de energía.
Organiza tu viaje:
- Familiarízate con plataformas como Electromaps, Ionity, Zunder o Fenie para conocer la ubicación de los puntos de recarga:
- Según sea el tiempo del que dispongas, vas a encontrar cargadores de carga rápida o semi rápida.
- Descárgate las aplicaciones necesarias para reservar y realizar el pago. Estas app te permitirán adecuar la recarga a tus necesidades:
- Podrás reservar la hora y gestionar el pago sin perder el tiempo haciendo cola en una taquilla.
Desplazamientos diarios:
- Conduce libremente en tus trayectos urbanos, el ahorro en la factura te permite desplazarte sin preocuparte por tu bolsillo.
El coche eléctrico es especialmente eficiente en ciudades ya que el tiempo de espera en semáforos, señales de Stop, etc, no tiene consumo.
- Conducir un coche eléctrico es más barato y más ecológico que hacerlo en un vehículo de combustión.
Te ponemos un ejemplo:
- Un desplazamiento de 100km a una velocidad constante de 120km/h consume aproximadamente 5 litros de gasolina. Calculando el precio del litro de combustible a 1,5€ (aunque es de sobra conocida su fluctuación), el coste del desplazamiento es de 7,5€.
- La misma distancia de 100km con idéntica velocidad pero recorrida por un coche eléctrico, consume 16 kWh. Usando una media de precio de 0,20€ (no teniendo en cuenta las tarifas reducidas o especiales), el coste del tramo recorrido es de 3,2€.
Con estos datos queda claro que una de la recomendación es disfrutar la conducción en zonas urbanas y optimizarla en trayectos largos.
La diferencia de conducir un coche eléctrico automático
Además de aprender a optimizar la carga de la batería, puede ser que nos preocupe también la forma de conducir un coche eléctrico automático.
Si hasta ahora hemos conducido un vehículo de cambio manual, ya podemos olvidarnos de la tensión que genera quedar parados en una cuesta y tener un juego de pies con el embrague, el acelerador y el cambio de marchas.
El coche eléctrico automático hace todo esto por ti.
Sin embargo, para los nostálgicos, el coche eléctrico automático dispone de un mando encargado de seleccionar la marcha adelante (D), modo parada o parking (P), marcha atrás (R) y la (N) que se trata de un punto neutro.
Algunos vehículos eléctricos tienen además una opción (B) para forzar la frenada regenerativa sin necesidad de hacerlo desde el pedal de freno.
Conducir un coche eléctrico versus un coche tradicional
Ahora que ya sabes cómo conducir un coche eléctrico, vamos a hablar de las ventajas de la conducción eléctrica frente a la de combustión.
Pero antes de nada, piensa en el silencio. Silencio significa:
- Suavidad en la conducción: se acaba la brusquedad del cambio de marchas y las abruptas aceleraciones y los frenazos en seco.
- Limpieza en la recarga: olvídate del fuerte olor a carburante, carga las baterías en tu propia casa, decidiendo el precio que quieres pagar según las tarifas por franjas horarias.
- Cero emisiones: responsabilidad con el medio ambiente.
El coche eléctrico tiene balance energético cero siempre que la fuente de energía provenga de renovables.
- Optimización de la frenada: recarga la batería con el freno regenerativo.
Se trata de una frenada suave y prolongada que además de detener el coche manteniendo la distancia de seguridad, va a aumentar la autonomía de nuestro vehículo.
En Cargacar somos instaladores de puntos de recarga de coches eléctricos. Por ello, si contactas con nuestros instaladores, estaremos encantados de aclararte cualquier duda.