La aparición de los coches eléctricos en nuestras ciudades y carreteras, ha planteado decenas de cuestiones que en muchos casos tienen respuestas tan lógicas, que al pensarlas dos veces, carecen de sentido.
Dudas sobre recarga de las baterías, autonomía o mantenimiento son obvias ya que estamos adentrándonos en un mundo que hasta hace unos años nos era desconocido: el de la conducción sin sistema mecánico.
Las inseguridades relacionadas con temas como: Si me quedo sin batería en mi coche eléctrico ¿pueden multarme? o si debo contratar un seguro para mi coche eléctrico están infundadas por tener las mismas respuestas que si se tratase de vehículos de combustión.
De todos modos, en este artículo vamos a tratar de aclarar dudas y reparar en algunas coberturas que se deberían tener en cuenta antes de firmar con la aseguradora elegida.
Tipos de seguros para coches eléctricos
Las pólizas que ofrecen las diferentes aseguradoras son las mismas tanto si se trata de coches de gasolina o gasoil como si son para los eléctricos.
Lo que puede variar son los paquetes de coberturas que se ofertan dependiendo de las características de cada vehículo.
Los tipos de seguros que se pueden elegir de forma general en cualquier compañía y para cualquier coche son las siguientes:
- A terceros: se trata del seguro de responsabilidad civil obligatorio marcado por la ley. La particularidad es que cubre los daños causados a terceros pero no al conductor o al propio vehículo.
- A terceros ampliado: existen diferentes paquetes según las compañías que pretenden cubrir los daños que podría sufrir el vehículo asegurado. Estos pueden ser lunas, incendio o robo.
- A todo riesgo: son pólizas más completas que incluyen asistencia en carretera, lesiones al conductor, vehículo de sustitución o daños que sufra el vehículo.
Pueden ser con o sin franquicia. Esto significa que el conductor se hace cargo de una cantidad fijada en dicha franquicia.
Coberturas exclusivas de un seguro para coche eléctrico
Lo que puede diferenciar el seguro del coche eléctrico del de combustión, son las coberturas que las empresas aseguradoras ofrecen a sus clientes.
Las más generalizadas son:
- Robo o daños del cable de carga. El precio de un cable de carga, dependiendo de modelos varía entre los 200 y los 300€.
- El cargador doméstico por daños, incendio o robo. La mayoría de seguros entienden el cargador instalado en la propia vivienda como parte del vehículo ya que es su fuente de energía.
- Asistencia en caso de descarga de la batería. La probabilidad de quedarse sin batería en un coche eléctrico es la misma que la de quedarse sin gasolina o gasoil en un vehículo de combustión.
No obstante, las aseguradoras incluyen este servicio que consiste en el remolque hasta un punto de recarga, al igual que con los coches de combustión, pero con independencia de la distancia.
- Servicio de recarga “in situ”. Se trata de un vehículo que lleva adaptado un cargador que puede dar la suficiente autonomía al coche eléctrico que le permita llegar a un punto de recarga.
- Vehículo de sustitución eléctrico. Las personas que se han pasado a la movilidad eléctrica están acostumbradas al silencio en la conducción, a los bajos costes de las recargas y a participar de la reducción de emisiones a la atmósfera.
Las compañías aseguradoras, conscientes de ello, ofrecen coches 0 emisiones como sustituto al vehículo averiado.
¿Es obligatorio contratar un seguro para un coche eléctrico?
El coche eléctrico tiene, al igual que los coches de gasolina o gasoil, la obligación de contratar un Seguro de Responsabilidad Civil.
Este tipo de seguro, en caso de accidente, cubre los daños que pudiéramos causar al otro.
La Ley sobre responsabilidad civil y seguro en la circulación de vehículos a motor, dispone en su artículo dos que:
“Todo propietario de vehículos a motor que tenga su estacionamiento habitual en España estará obligado a suscribir y mantener en vigor un contrato de seguro por cada vehículo de que sea titular, que cubra, hasta la cuantía de los límites del aseguramiento obligatorio, la responsabilidad civil a que se refiere el artículo 1”.
Como se puede observar en el anterior párrafo de la Ley, todos los vehículos a motor, independientemente de si son propulsados por combustibles fósiles o por energía renovable, tienen la misma obligación de contratar el seguro de responsabilidad civil.
Por tanto, la obligación de tener seguro del coche eléctrico es únicamente de responsabilidad civil.
Cuánto cuesta un seguro para un vehículo eléctrico
Ahora que ya sabemos que los tipos de seguro y la obligatoriedad de contratar un seguro es la misma para coches de combustión que para los eléctricos, vamos a ver qué otros factores influyen en el importe final de nuestra póliza.
Características del coche: el precio puede subir si el coche duerme en la calle, si es de segunda mano, si es de mayor cilindrada o por la cantidad de extras que lleve el automóvil a asegurar.
Perfil del conductor: los conductores por debajo de los 25 años van a pagar más, pero también tendrán tarifas más altas quienes tengan multas acumuladas, hayan tenido accidentes o no conserven todos los puntos del carnet.
Sin embargo, un informe de la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) fechado en noviembre de 2023 concluye que los seguros de los coches eléctricos son hasta un 17% más caros que los de los vehículos de combustión.
Esto se debe al valor de las baterías. En caso de siniestro, en un seguro a todo riesgo, sustituir las baterías puede alcanzar, en el caso de los coches de mayor autonomía, hasta 30.000€, según datos de la OCU.
De hecho, la OCU advierte que muchas aseguradoras frente a accidentes leves, prefieren declarar al vehículo siniestro total que reemplazar la batería.
No obstante, el ahorro económico que supone el uso de energía renovable frente al combustible fósil, es mucho más que suficiente para que el incremento de cuota del seguro del coche eléctrico sea simplemente anecdótico.
¿Debería de ser más barato el seguro a todo riesgo del coche eléctrico?
Los seguros para vehículos están pensados básicamente para situaciones de accidente, incendio o robo.
Sin embargo, algunas de las compañías aseguradoras incluyen en sus paquetes “todo riesgo” la asistencia de viaje que incluye las averías.
Los coches eléctricos tienen una tasa de averías que ronda el 0%. Esto es así porque no tienen un motor de combustión, ni caja de cambios ni embrague.
Por tanto, los componentes en riesgo de deterioro y en consecuencia de averías, se reducen hasta la nada.
Por otro lado, los coches eléctricos no necesitan realizar las revisiones periódicas de cambio de aceite, filtros, lubricantes, etc.
En conclusión, las pólizas de seguros han incorporado coberturas adaptadas a las particularidades de los coches eléctricos pero temen enfrentarse al desembolso que puede ser la reparación o sustitución de la batería .
El equipo de instaladores de Cargacar, repartidos por todo el territorio nacional, trabaja para minimizar los posibles problemas que los daños ocasionados a los cargadores puedan ocasionar.
Ante cualquier incidencia, no dudes en contactarnos. En menos de 24 horas realizamos la sustitución o reparación del cargador dañado.