La autonomía del coche eléctrico es siempre tema de debate entre los afines y detractores de la movilidad eléctrica

Saber cuánto tiempo podemos estar conduciendo sin detenernos se ha convertido en una fuente de motivación para los fabricantes que siguen invirtiendo en I+D+I para mejorar sus cuotas de mercado. 

Uno de los factores que afectan a la autonomía es la calefacción. La diferencia básica entre un motor de combustión y uno eléctrico es la eficiencia energética. 

Las pérdidas térmicas del motor de combustión son de un 50% aproximadamente. Esta energía que no se utiliza para generar movimiento, se usa en parte para calentar el interior del habitáculo. 

El sistema de calefacción del coche eléctrico obtiene la energía de la batería. La eficiencia del motor eléctrico está entre el 75 y el 90%, por tanto, no hay suficiente excedente térmico para calentar el interior del automóvil. 

En este artículo vamos a explicar cómo funciona la calefacción en un coche eléctrico y cómo puede afectar a la autonomía. 

¿Cómo funciona la calefacción en un coche eléctrico?

El motor de un vehículo eléctrico, debido a su eficiencia energética, no genera calor. Por tanto, no necesita líquido refrigerante. En su lugar, la calefacción en el coche eléctrico puede funcionar mediante diferentes sistemas: 

RESISTENCIA ELÉCTRICA

Esta resistencia obtiene la energía de la batería del propio vehículo; viene a ser como las conocidas resistencias que vemos en las estufas domésticas. 

El calor producido entra en el habitáculo forzado por un ventilador.

Este sistema puede consumir entre un 6 y un 10% de energía de la batería en temperaturas superiores a 0º.

La ventaja es que se puede utilizar con el motor del coche apagado. 

Sin embargo, las diferentes marcas lo han ido sustituyendo para ganar autonomía en sus modelos eléctricos dada su baja eficiencia.  

BOMBA DE CALOR

Este sistema funciona igual que los aparatos de aire acondicionado que tenemos en nuestras casas. 

El proceso se basa en el paso de un gas de estado gaseoso a líquido produciendo calor

Cuando la conversión es a la inversa, enfría.

Además, para reducir el consumo de energía, se aprovecha el escaso calor residual de la batería, el motor eléctrico y el inversor.

Consta de un compresor, un evaporador, una válvula de expansión y un condensador que mueven el calor a través del vehículo.

La principal ventaja de este sistema es que la demanda de energía de la batería es mínima por tanto no afecta tanto a la autonomía. 

Fabricantes como Tesla, Peugeot, BYD, Mercedes, BMW y DS ya lo instalan de serie en sus modelos eléctricos. 

ETANOL

Volvo ha estado trabajando en esta solución  para que la climatización no interfiera en la autonomía de la batería. 

Se trata de un combustible que funciona a través de unos quemadores que calientan el habitáculo. Es barato y tiene un alto poder energético. 

Como ventaja no descarga la batería y su inconveniente es que el pequeño depósito debe ser rellenado con regularidad y, en su combustión, el etanol produce CO2.

Impacto en la autonomía de la calefacción en coches eléctricos: Modelos antiguos vs. Modernos

Ya sabemos cómo funciona la calefacción de un coche eléctrico y las soluciones que los diferentes fabricantes están desarrollando y aplicando para no reducir la autonomía del coche eléctrico.

Sin embargo, no está de más hacer una comparativa entre el consumo de los motores térmicos y los eléctricos para evidenciar que no son mayores los problemas de autonomía del coche eléctrico que de su homólogo de combustión. 

Atrapados en invierno. 

Este es el típico ejemplo que nos lleva a una situación extrema para conocer datos exactos. 

Vamos a ponernos en situación imaginando que estamos atrapados en la carretera por una retención en pleno invierno con dos vehículos distintos, uno de combustión térmica y uno eléctrico. 

El coche de gasolina tiene el depósito lleno y el eléctrico la batería cargada al 100%.

Consumo de la climatización en coche de gasolina.

Un vehículo de combustión consume al ralentí entre 1,5 y 2 litros de gasolina por hora

La capacidad media de los depósitos de gasolina está entre los 45 y 65 litros. La media sería de 55 litros de capacidad

Por tanto, en esta situación el tiempo de duración del depósito es de entre 27,5 y 36 horas.  

Consumo de la climatización en coche eléctrico

La capacidad de la batería del coche eléctrico oscila entre los 40 y los 100kWh. La media para este ejemplo será de 70kWh

El consumo de la calefacción en bomba de calor es de 1,5kWh de media cada hora. 

El resultado  es  una autonomía de 46 horas

Estos datos confirman que la autonomía del coche eléctrico no es un problema mayor que el que suponía la autonomía del coche de combustión a la hora de poner la calefacción en invierno. 

Consejos para mantener tu coche eléctrico caliente sin que afecte a la autonomía

Ya se han mencionado los diferentes sistemas de calefacción y sus consumos, sin embargo, existen algunas fórmulas para alargar la autonomía sin pasar frío. 

Antes de escoger el modelo o fabricante debemos tener en cuenta los materiales aislantes. Algunos coches están equipados con componentes de automoción de Polipropileno Expandido (EPP), que consigue mantener la temperatura en el interior del vehículo. 

Además, también es útil saber si los asientos llevan calefacción y sistemas de descongelación de las ventanas. Esto es interesante porque podemos reducir el espacio a calentar y por tanto alargar la autonomía. 

Desde Cargacar aconsejamos climatizar el coche unos minutos antes de necesitar el vehículo mientras está conectado al cargador. 
Se puede hacer de forma remota a través de la aplicación móvil, lo que va a reducir la descarga de la batería una vez el vehículo está en marcha.